La reforma y la rehabilitación representan más del 40% del valor de los materiales del conjunto de la construcción, según la patronal Andimac, «un sector fundamental y con un enorme potencial tractor sobre la economía que contribuiría a su recuperación».
La asociación remarca la importancia de incentivar la demanda interna durante los próximos meses, teniendo en cuenta el desplome del turismo y como palanca a corto plazo de soporte económico y social, ante la Comisión para la Reconstrucción Económica y Social de España, «el órgano en el que se deberá consensuar una estrategia con aportaciones de todas las fuerzas políticas frente a la crisis del coronavirus».
Además, insiste en que este segmento representa el 75% del valor de los materiales en edificación residencial -construcción nueva más reforma en edificios y viviendas-, según la última edición del Observatorio 360ª del Mercado de Materiales de Construcción en Edificación Residencial. Un informe, elaborado por Arthursen, del que también se desprende que en términos de actividad agregada, implica un valor de materiales que se corresponde con 95.000 viviendas nuevas en construcción, frente a 279.000 viviendas reformadas.
Andimac defiende que si la construcción aporta en torno al 10% del PIB, la mayoría de las actuaciones se corresponde con las que se realizan en viviendas y edificios ya habitados, y no tanto con las de los nuevos desarrollos urbanísticos. «Es decir, que las actividades de reforma y la rehabilitación son cruciales para el conjunto de los actores que intervienen en la cadena industrial de materiales de construcción, una cadena que incrementa más de dos puntos el peso de la construcción en el PIB».
En este sentido, la patronal estima que las reformas movieron el año pasado en España unos 18.000 millones de euros, gracias fundamentalmente a la compraventa de viviendas y a la necesidad de adaptar y mejorar el parque. Sin embargo, desde Andimac advierten del peligro que supone que el parque de edificios envejezca a un ritmo del 1,8%, mientras la rehabilitación edificatoria afecta únicamente al 0,15% del mismo, en lo que llaman un «lento y peligroso proceso de obsolescencia».
Por todo ello, la patronal pide a la futura Comisión para la Reconstrucción Económica y Social de España «que ponga en marcha un Fondo de Garantías con líneas para comunidades de propietarios vía ICO que financien el 80% de las obras que impulsen la eficiencia energética, aseguren el acceso a las ayudas del Plan Estatal para la Rehabilitación y minimicen el riesgo que asumen los bancos al costear las reformas de las zonas comunes, lo que serviría para rejuvenecer el parque, evitar un deterioro de los ahorros de los hogares españoles y lograr un modelo de negocio más sano para el sector de la construcción».
De igual modo, Andimac asegura que recuperar la deducción en el IRPF por reformar la vivienda habitual beneficiaría a unos 270.000 contribuyentes, que podrían deducirse unos 100 millones de euros. Ese ahorro incrementaría el número de obras de mantenimiento y mejora, y tendría un mayor retorno para las arcas públicas vía IVA. También serviría para acabar con la competencia desleal y supondría un incentivo para aflorar unos 8.000 millones de euros de economía sumergida.