El 60% de las viviendas de España se han construido sin criterios de eficiencia energética

En la actualidad, España cuenta con 25 millones de viviendas, de las que se estima que 15 millones requieren una rehabilitación. A esto se suma que el 60% de las viviendas de España se construyeron sin ningún criterio de eficiencia energética, antes de que entrase en vigor la Norma Básica de la Edificación sobre Condiciones Térmicas en los edificios en el año 1979; es decir, sin ningún requisito de aislamiento.

La eficiencia energética es fundamental para conseguir un mundo sostenible. La razón es que fabricar y distribuir energía resulta caro y tiene un fuerte impacto sobre nuestro medio ambiente. La eficiencia energética facilitará que toda la humanidad disfrute de unas condiciones de vida dignas y saludables, sacando el mayor partido posible de la energía.

Si tenemos en cuenta que las viviendas y edificios causan el 56% de la contaminación frente al 13% que proviene de los vehículos y que el parque inmobiliario de nuestro país es uno de los más obsoletos de la Unión Europea, las consecuencias son bastante perjudiciales para nuestro planeta.

 

Desde la Plataforma de Edificación Passivhaus (PEP) consideramos que una solución con la que se puede avanzar para disminuir este consumo es apostar por la rehabilitación.

Es un hecho que la necesidad de actuar sobre el parque ya edificado queda patente. Tanto es así, que este año se publica la revisión de la Estrategia a largo plazo para la Rehabilitación Energética en el sector de la Edificación en España, que marca como objetivo la rehabilitación energética de 300.000 viviendas al año durante los próximos diez años.

Si, finalmente, todas estas viviendas se rehabilitasen hasta alcanzar la certificación Passivhaus -el estándar de construcción más extendido y contrastado a nivel mundial- se conseguirían ahorros energéticos de 912 a 1185 kWh/m2·a, que suponen entre 63 y 81 millones de €/año. Además, esto significa que se dejarían de emitir a la atmósfera 124.104 T de CO2eq. /año.

 

Desde PEP junto a los más de 700 socios que conforman la organización, estamos llevando a cabo una intensa labor de concienciación con la Administración y aunque somos conscientes de que estamos avanzando, también sabemos que queda mucho trabajo por hacer para dar cumplimiento a la Directiva Europea 2010/31, que exige a los estados miembros de la Unión que todos sus edificios sean Edificios de Consumo Casi Nulo (ECCN) antes del 31 de diciembre de 2020.

Un edificio con certificación Passivhaus permite un ahorro energético de hasta el 90% comparado con el de un edificio convencional, que a su vez se traduce en la reducción de la huella de carbono, así como de las emisiones a la atmósfera y otros daños ambientales derivados de nuestro excesivo consumo energético… Entonces, ¿por qué no lo aplicamos?